domingo, 24 de febrero de 2008

EL LOBIZON



Animal Mitológico que surge de la transformación de un ser humano en un perro negro, grande semejante a un lobo.

La creencia de la transformación del hombre en animal es antiquísima. Herodoto registra historias recogidas en sus viajes, sobre un pueblo que en determinada época del año se transforma en lobos. Cuando Sebastián Gaboto toma contacto con aborígenes guaraníes en las cercanías de la actual Itatí, su cronista anota la conversión de hombres en tigre. La acción de los jesuitas en el mundo guaraní, dejó profundas huellas en la cultura desarrollada después de su partida. Estos misioneros, disfrazaron muchas creencias nativas con ropaje religioso para facilitar la transferencia de la nueva doctrina.
Entonces, determinados valores o reglas sociales eran transmitidas como tabúes, relatando historias fantásticas. Si nacían 7 hijos varones, seguidos, el último sería maldito, transformándose en lobo o perro los días viernes a la medianoche. Si el séptimo hijo era mujer, esta sería bruja. En estas fabulaciones, que llegaron a nuestros días con pocas variantes, Dios castigaba a los transgresores de la regla, condenándolos a sufrir horrendos castigos.
Dicen nuestros paisanos, que el hombre lobisón, los días sábado tiene apariencia macilenta, que sufre fuertes dolores de estómago, que su olor es insoportable. Es que el viernes a la noche vagó por los basurales, se revolcó en las osamentas, comió carne podrida, engulló algún niño sin bautizar, y atacó a cuanto caminante encontró, largando fuego por los ojos y la boca. Los que afirman haberlo visto en mi provincia, dicen que es un perro negro, grande, sin cabeza, o si la tiene luce una oreja cortita y una larga hasta el piso, que arrastra cadenas. Produce tanto terror su presencia, que los perros gimen y se esconden al solo olfatear su presencia. Los lugareños cuidan que el Lobisón no pase entre sus piernas, porque de esa manera, les transfiere la maldición. No debe atacarse al Lobisón, porque no muere, y luego la venganza es terrible. La única manera de eliminarlo es utilizar una bala bendecida, o hacerle una muesca en forma de cruz en la punta.
En las pequeñas poblaciones, cuando una persona es rechazada socialmente, se le endilga la maldición de ser Lobisón. Esto es causa de marginación sin vueltas. Las incontables historias acerca de este ser maldito, dicen por ejemplo que al momento de transformarse, el hombre siente fuertes dolores de estómago, comienza a revolcarse dando siete vueltas al derecho y siete vueltas al revés. Mientras va girando sobre su cuerpo reza de ida 7 credos al derecho y al volver 7 credos al revés. Luego sale a atacar, primero a sus enemigos y luego al que encuentra. La reacción de los pobladores ha sido tan violenta en el pasado, que llegó a lincharse a personas inocentes. Para frenar esa paranoia, en nuestro país se estableció el padrinazgo presidencial de todo séptimo hijo.

1 comentario:

Amatista dijo...

Esta es la verción Paraguaya;
te la dejo por si sea de interes.

Luison

"Otros mitos emparentados traen justicia y venganza, castigo a los que se exceden; protegen la flora y la fauna; otros devoran hombres y mujeres, otros roban niños, silban y merodean.

Luisón daña más que todo estos penantes. Hace imposible la vida del mas allá. Juega con el destino del alma que se vuelve irredimible una ves que el interviene en el colmo de su obrar maléfico. Por eso es tan temido."Leyendas del Paraguay, Autor: Tomás L. Micó, Paginas 66 y 67, Instituto Paraguayo del Hombre, Año: 1982.

Esta criatura es la ultima dada a luz por la pareja maldita; Luisón es el 7º Hijo varón de Tau y Kerana...

Sobre este, cayo la mayor desgracia, la maldición se hizo mas poderosa en el y en el se consumió.

Cuando nació Luisón el firmamento se ilumino con el brillo de la constelación denominada como " Las siete cabrillas" dando así la señal divina, de que la maldición había sido consumada.

El 7º hijo de Tau y Kerana paso así a convertirse en el engendro que de ahí en adelante llevaría y esparciría la mayor y peor maldición conocida por el pueblo Guaraní.

Este Ser arrastra la muerte por donde vaya, se encuentra varado en los caminos de la Vida y la Muerte...

No solo ataca la carne del Ser humano, sino que devora su alma, al ser tocado por la maldición la victima, que siempre será Hombre, se convertirá en un ser similar al original.

Deambula en las noches de Luna Llena, dicen que preferiblemente los Martes y Viernes...

Las jaurías de perro le persiguen de cerca ladrándole y aullando de forma desesperada, un olor nauseabundo le acompaña y cualquiera que lo ve termina aterrado o enloquecido.

Cuando luisón pierde sus formas humanas se trasforma en una criatura similar a un perro grande o un lobo; de dientes punzantes, pelambre espeso y garras filosas, de apariencia demoniaca avanza en la oscuridad de la noche con sus ojos centelleantes, buscando victimas a las cuales atacara, matara y devorara...pero esto ultimo no la hará enseguida, esperar a que el cuerpo sea enterrado y cuando este bajo tierra ira donde yacen los restos, escarbara la tumba y devorara el cadáver revolcándose en los restos.

Si de casualidad, la victima es convertida, esta se trasformara en un ser parecido...

"Su andar termina al clarear el nuevo día, retomando sus humanas formas regresa a sus ocupaciones donde se lo ve sucio, cansado, esquivo, de mirar doliente y melena desgreñada. Las gentes no saben si tenerle lastima o sentir repulsión ante la duda ardiente de que sea un Luisón. Al presentirlo todos e santiguan y callan. Es el hombre lobo temible y de hábito atroz, capaz de hacer perder al hombre su condición humana transformándolo en penante bestia y demonio. No conocen los Guaraníes mayor desgracia que esta, por eso huyen de el."Leyendas del Paraguay, Autor: Tomás L. Micó, Paginas 66 y 67,Instituto Paraguayo del Hombre, Año 1.982.

"Según la mitología Guaraní este monstruo y sus 6 hermanos deambulan sobre la tierra en diversos países, incluso india y los de Europa este supuesto es conocido."Leyendas del Paraguay, Autor: Tomás L. Micó, Paginas: 66 y 67.Instituto Paraguayo del Hombre. 1.982.

Entre otras habladurías populares; se cuenta que todo 7º hijo Varón llevara la maldición en especial si los 6 hermanos anteriores fueron hombres. Tener 7º hijos varones de seguido conlleva a la duda de si el 7º será o no Luisón. Para Asegurar el alma del Niño los padres piden que el padrino de Bautismo sea un líder o un sacerdote.

También se cuenta que al ser aniquilado retoma su forma humana.
Con respecto a la manera.

Fuente:
Leyendas del Paraguay, Autor: Tomás L. Micó, Paginas 66 y 67Instituto Paraguayo del Hombre, Año 1982.

Gauchito Gil

La maldicion del Gauchito Gil

Machera el santo malandro

Maria Lionza